APUESTAS

Vamos a partir de la base que empezamos con desventaja con las casas de apuestas y es que cada apuesta que hacemos lleva implícita una comisión para la bookie. Supongamos que esto es una carrera de atletismo y que nuestro rival (bookie) parte con 1 km de diferencia. Nosotros elegimos la distancia, pero es evidente que si elegimos una carrera de 1000, 3000 o 5000 metros tenemos las de perder puesto la ventaja es muy grande. Debemos buscar una carrera larga y demostrar que, poco a poco, podemos ir recortando distancia y adelantarles. Respetar la banca con apuestas que nunca representen el 7-10% de nuestra banca no es más que el primer paso de esta maratón, una opción que no es fruto de la casualidad sino la de tener un margen de error en caso de racha de fallos. 

Solamente de esta forma podremos darle más importancia a nuestros conocimientos y buenas conductas, eliminando el factor del azar ya que podremos fallar varias apuestas sin que ello suponga caer en la bancarrota. Respetar la banca no es sinónimo de ganar dinero, pero es el primer paso que debemos hacer para conseguir ser un jugador ganador. No olvidemos que apostar cantidades elevadas, como por ejemplo el 50% de nuestra banca, es convertir este juego en un “rojo o negro” con más posibilidades de fracaso que de victoria. Es por ello que a las apuestas tienen un stake, donde stake 1 representa el 1% de nuestra banca y así sucesivamente hasta llegar a 10 como máximo y donde la elección del stake es tan importante (o más) como la propia apuesta seleccionada.